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Seguridad mediante la innovación: el paracaídas PENTAGON destaca del resto por su innovador diseño, el cual se ve combinado con materiales de alta calidad. Tras desplegarlo, el PENTAGON impresiona por su rápida apertura, inmediata absorción de las oscilaciones y baja tasa de caída. El resultado es un paracaídas de emergencia en el que poder confiar por completo en cualquier situación.
La forma pentagonal es autoestabilizante. Así, si el PENTAGON recibe un impulso pendular hacia una de sus cinco esquinas, la fuerza restauradora actuará de manera automática en la dirección opuesta. Entrente de una esquina hay un lado, y allí la circulación del aire es significativamente diferente, y esto contrarresta oscilaciones indeseadas. La estabilidad pendular resultante es excelente.
El PENTAGON es rápido abriendo, lento descendiendo. La tasa de caída es extraordinariamente baja: durante las pruebas de homologación, a carga máxima, el PENTAGON 120 mostró una tasa de caída de 5,2 metros por segundo. Más en NOVA.
